El viernes 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos, nos acompañaron desde el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología MUNCYT con una reflexión sobre la lastimosa existencia de la pena de muerte en muchos países de nuestro planeta.
Sin embargo, a pesar de ser un mensaje clave en la charla, pudimos embarcarnos en un viaje por los campos de la Historia y la Química. Un recorrido por sonados envenenamientos a lo largo de los tiempos, tanto fortuitos como intencionados. Elementos químicos como el mercurio o el arsénico y otros menos sospechosos como el talio o el radio eran la causa de dichas atrocidades. Nos dimos cuenta de que entre el medicamento y el veneno sólo hay una fina línea de separación ¡qué importante es la dosis!
Ésta y otras charlas son fundamentales en la educación formal por conectar conocimientos de diferentes ámbitos de aprendizaje. Agradecemos mucho la labor divulgativa ofrecida por otras instituciones al servicio de la enseñanza en colegios e institutos.
María Bandín